El Sistema de Transporte de Material Grueso (STMG) alcanzó un hito en su desempeño operativo. En septiembre del año pasado, logró su mejor rendimiento histórico. Con una gestión optimizada y el respaldo de tecnología avanzada, el área no sólo superó sus metas, sino que redefinió los estándares de eficiencia en el sector.
En cifras concretas, el rendimiento alcanzó 10.271 toneladas por hora (TPH) y 208 kilotoneladas por día (KTPD) en promedio durante el mes de septiembre, superando las expectativas de 10.200 TPH y 202 KTPD. A lo largo de 2024, la producción acumulada ascendió a 69.994 kton, posicionándose como la más alta desde 2017. Estos logros reflejan el impacto de una estrategia de mejora continua que ha optimizado cada fase del proceso, desde la alimentación hasta el mantenimiento.
Para Karen Foster, Gerenta de Operaciones Integradas, “la excelencia operacional alcanzada es fruto de la implementación disciplinada de herramientas como el Plan de Implementación Táctico (PIT), la estandarización de procesos, las confirmaciones de rol y proceso y la colaboración activa de un equipo multidisciplinario que desafió los límites operacionales de forma integrada”.
La clave del éxito se basó en la estandarización operativa y la toma de decisiones basada en datos. En la operación de CAEX, se redujo en un 9% el tiempo de espera de mineral en el cambio de turno y se definieron cuatro frentes de mineral estratégicos para minimizar riesgos.
En chancadores se aseguraron niveles óptimos de stock y se implementó una nueva estrategia de setting. Además, la calibración del pesómetro permitió realizar ajustes de parámetros que incrementaron la capacidad del STMG a 10.700 TPH, mientras que el mantenimiento preventivo fortaleció la confiabilidad del sistema con un enfoque en la renovación de polines y la disponibilidad de repuestos. El uso de RMES como herramienta de gestión de activos nos apoya en la búsqueda para alcanzar el full potencial.
Javier Morales, superintendente de Chancado y Correas, valoró este avance y destacó que “el PIT nos permitió priorizar problemas y demostrar que el STMG no era el cuello de botella. Hoy tenemos una continuidad operacional histórica, lo que asegura el suministro constante de material hacia la planta”.
Si bien los avances son significativos, persisten desafíos que marcan la ruta de mejora para el futuro. La implementación de un modelo de restricciones en STMG y ADA N1, la optimización del uso del Pica Rocas, la reducción de tiempos de atollo y la mejora en la limpieza bajo correas son algunas de las áreas prioritarias.
Maikol Vega, superintendente de Operaciones Integradas, señaló que “uno de los principales aprendizajes fue estandarizar nuestras prácticas operativas y visualizar en línea los KPI’s, lo que nos permitió tomar decisiones más efectivas y acercarnos al máximo potencial del sistema”.
Para 2025, la meta es llevar el STMG a un nivel aún más alto. La integración tecnológica será un pilar fundamental, con un mayor uso de las plataformas ADA y SIRO para la identificación de restricciones en tiempo real y el análisis predictivo de tendencias operacionales.
En terreno, se reforzará la gestión del mantenimiento y la optimización de la alimentación a chancado, mientras que en el GIO se potenciará el uso de herramientas que permitan monitorear en tiempo real y así gestionar las restricciones y la eficiencia global del sistema.